lunes, 4 de febrero de 2013

¿Qué es la democracia paritaria?

Es la forma de organización social y política en la que existe igualdad de número y derechos de los distintos colectivos que componen la sociedad y que deben formar parte de los órganos decisorios y de gobierno.
Históricamente las mujeres han sido apartadas de la participación social y política ya que no se las ha considerado ciudadanas de pleno derecho. En la actualidad, la mayoría de las democracias adolecen de una escasa presencia de mujeres en los poderes y órganos del Estado, por lo que dicha equiparación es considerada por determinados colectivos de mujeres un principio fundamental para la consecución de la igualdad entre mujeres y hombres.

lunes, 21 de enero de 2013

¿Por qué es importante utilizar lenguaje no sexista?


Lo que no se nombra no existe. Esto, trasladado al género, implica que el hecho de que las mujeres no tengan una representación simbólica en la lengua contribuye a su invisibilización. De ahí la necesidad, a fin de lograr el objetivo de la igualdad entre sexos, de hacer un uso del lenguaje que represente a las mujeres y a los hombres y que nombre sus experiencias de forma equilibrada.
Un lenguaje no sexista es aquel que no oculta, no subordina, no infravalora, no excluye. En 1973, recién iniciada la segunda ola del feminismo, el artículo “Language and Woman’s Place” [“El lenguaje y el lugar de la mujer”] de la lingüista norteamericana Robin Lakoff aparecido en la revista Signs [1], planteó por primera vez una reflexión académica en torno a la relación de hombres y mujeres con el lenguaje y sus usos.
En ese momento, se abrieron dos líneas de investigación que, con sus variaciones y particularidades, podemos definir como el “enfoque de la diferencia” y el “enfoque de la dominación” (Eckert y McConnell-Ginet, 2003:1):
• El enfoque de la diferencia estudia los diferentes usos del lenguaje por parte de las mujeres y los hombres.
• El enfoque de la dominación entiende el lenguaje como un medio más para la opresión de las mujeres.
Los estudios del sexismo en el lenguaje se enmarcaron en estos dos paradigmas hasta que la obra de Judith Butler, Gender Trouble, publicada en 1990, da paso a una nueva metodología de interpretación de la categoría “género”. De esta manera, el uso del lenguaje pasa a considerarse como un elemento más de los que intervienen en la construcción del género, entendido este como género performativo, es decir, basado en la adecuada “puesta en escena” de sus comportamientos socialmente asignados [2].
Así, una vez planteadas las primeras reflexiones sobre la discriminación en el lenguaje, comenzaron a surgir todo tipo de estudios y propuestas tendentes a su eliminación y/o corrección que, en los primeros años, se desarrollaron sobre todo en el mundo anglosajón, para ir después ampliándose a otros países y otras lenguas [3].
En España, las actuaciones encaminadas a la eliminación o corrección de los usos sexistas de la lengua estuvieron marcadas por los acontecimientos históricos por los que atravesó el país desde mediados de la década de 1970.
Dichos acontecimientos afectaron también a todo el desarrollo de los estudios de género y a la implantación de las primeras medidas y políticas de igualdad, que no verían la luz hasta mediados de la década de 1980 con el primer gobierno progresista desde la instauración de la democracia5.
La creación en 1983 del Instituto de la Mujer será fundamental para impulsar las actuaciones tendentes a la eliminación de los usos sexistas de la lengua. El primer Plan de Igualdad de Oportunidades (1988 – 1990) ya recogía la necesidad de revisar los textos reglamentarios para evitar usos y expresiones que reforzaran actitudes de desigualdad hacia las mujeres y, en 1989, se publicaron el primer folleto y la primera guía para la eliminación de los usos sexistas del lenguaje. Estos documentos tenían una clara intención divulgativa y sensibilizadora en cuanto a la necesidad de modificar las representaciones estereotipadas de hombres y mujeres. Los esfuerzos realizados culminarán con la creación, en 1994, de un grupo de trabajo dedicado específicamente a este tema, NOMBRA (no omitas a las mujeres, busca representaciones adecuadas), a cuyas integrantes se debe buena parte de la producción académica española sobre esta disciplina. Siguiendo esta línea, en 1995 el Ministerio de Educación y Ciencia publica una Orden por la que se adecua la denominación de los títulos académicos oficiales a la condición masculina o femenina de quienes los obtengan (BOE 28/3/95).
Las actuaciones iniciadas por el organismo de igualdad estatal sitúan a España en un lugar prevalente en el panorama internacional en cuanto a las Reformas No Sexistas de la Lengua. Sus equivalentes a nivel local y autonómico siguieron el ejemplo del organismo del Estado y, en la actualidad, se cuenta con gran número de publicaciones encaminadas a conseguir un lenguaje más inclusivo con las mujeres y que respete de manera clara los principios democráticos.
Una buena muestra de lo dicho se puede encontrar en la Actuación 1 del proyecto Web con Género, “Recopilatorio de recursos web sobre lenguaje no sexista”.
En nuestro país, la elaboración de estudios y guías que ayuden a la modificación de los usos del lenguaje ha estado fundamentalmente centrada en el ámbito administrativo. En esta misma línea de actuación, que pretende intervenir sobre el lenguaje con el objetivo de eliminar aquellos usos que dificulten un tratamiento igualitario entre mujeres y hombres, se sitúa el proyecto Web con Género, con la novedad de que su ámbito de aplicación son las Tecnologías de la Información y la Comunicación, centrando la intervención específicamente en el lenguaje utilizado en las páginas web.
En este sentido, cabe señalar que no todas las teorías sobre el lenguaje sexista están de acuerdo en torno a la necesidad de desarrollar acciones modificadoras del mismo. Así, a la cuestión tradicional de si el lenguaje reproduce o produce una determinada imagen del mundo, el feminismo añadió otra disyuntiva plasmada en el debate sobre la necesidad de intervenir sobre él para modificar la desigualdad social o, por el contrario, confiar en que una fuerte acción social igualitaria acabaría consiguiendo que el lenguaje se modifique por la propia inercia del cambio.
Esta dicotomía es apuntada por la lingüista Anne Pauwels de la siguiente manera:
Quienes apoyan la postura de que “el lenguaje refleja la realidad” se inclinan menos a promover una acción lingüística ya que dudan de que un cambio en el lenguaje lleve consigo el deseado cambio social. Argumentan que las prácticas sexistas en el lenguaje son el resultado de actitudes sexistas de quienes lo usan que además viven en comunidades que no promueven un tratamiento igualitario entre mujeres y hombres. (…) Por otro lado la postura de que “el lenguaje refleja la realidad social” no excluye del todo la pertinencia o incluso la necesidad de implementar una acción lingüística. De hecho, un grupo importante de quienes proponen guías oficiales para un uso no sexista de la lengua suscriben este punto de vista y, no obstante, argumentan a favor del cambio porque el cambio en la lengua va por detrás de los cambios en las prácticas sociales y culturales (1998: 84 – 85) [4]

Notas

[1] El artículo se convirtió en un libro del mismo nombre publicado en 1975 por la editorial Harper and Row. Su traducción al español es de 1981.
[2] Ver Cameron y Kulick (2003)
[3] 4 Para un recorrido por los principales trabajos sobre eliminación del sexismo en la lengua ver Pauwels (1998). 5 Para más información sobre el acceso a las primeras medidas de igualdad en España ver Viñuela (2003).
[4] The supporters of the ‘language reflects reality’ view are less strongly inclined to call for linguistic action since they doubt that language change would be able to bring about desired social change. They argue that sexist practices in language mainly result from prevailing sexist attitudes of their users who are living in communities which do not promote the equal treatment of women and men. (…) [Whereas] the ‘language reflects social reality’ view does not completely exclude the desirability of, or even necessity for, linguistic action. In fact, a substantial group of proponents of oficial guidelines for non-sexist language use subscribe to this view and nevertheless argue in favour of change because language change lags behind changes in social and cultural practices (1998: 84 – 85).

martes, 2 de octubre de 2012

La mujer lucha por la igualdad en el deporte


Tras los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres, llama la atención la progresiva presencia de la mujer en el deporte —incluidos algunos éxitos sonados—, del que históricamente ha permanecido excluida, como de tantas otras ocupaciones atribuidas en exclusiva a los hombres. Siendo por el momento lógica la práctica deportiva separada de uno y otro sexo, la experiencia de muchas separaciones forzadas entre hombres y mujeres permite presagiar, por el momento como una utopía, un futuro de deporte mixto, como en tantas otras actividades de la vida.
Un ejemplo de segregación por razón de sexo es el que viene practicándose en España en algunos colegios, la mayoría vinculados al Opus Dei, que tratan de justificarlo en unos supuestos mejores rendimientos académicos de niños y niñas por separado, dato no consistente, según explicó en 2011 la revista Science. El Tribunal Supremo, en sendas sentencias conocidas en agosto último, ha dado la razón a las Administraciones autonómicas andaluza y cántabra, que retiraron la financiación a dos centros educativos que solo admitían alumnos o alumnas, con lo que se vulneraba una ley de 2006 que excluye de la financiación pública a los centros que discriminan a sus alumnos. En realidad, la segregación educativa por razón de sexo persigue, como se hacía durante el franquismo, evitar el contacto entre chicos y chicas, en línea con lo establecido en 1930 por el papa Pío XI en una encíclica: “La enseñanza mixta promueve la promiscuidad y la igualdad”.
En la práctica del deporte, la separación entre chicos y chicas está, por el momento, avalada por las diferencias físicas de hombres y mujeres. Un experto en Educación Física, el alicantino Llorenç Solbes, asegura que la muy diferente configuración del cuerpo masculino y femenino impide la participación conjunta de hombres y mujeres en el deporte en condiciones de igualdad, dada la superior potencia de los primeros. Pero en realidad, admitiendo que hoy por hoy es así, nada debería impedir que las mujeres que lo desearan pudieran competir con los hombres en el deporte, aunque estuviera asegurada su inferioridad. Ahí está el ejemplo de la futbolista mexicana Maribel Domínguez, llamadaMarigol por su facilidad para el tiro a puerta, que, tras hacerse pasar por un chico para jugar en su país en equipos juveniles masculinos, solicitó a la FIFA jugar al fútbol con los hombres y le fue denegado.
El mito de la fortaleza del hombre y la debilidad femenina carece de credibilidad cuando se observa cómo, sin ir más lejos, nuestro vecino Marruecos dedica a gran número de mujeres a faenas agrícolas, que exigen acarrear pesadas cargas y realizar penosos esfuerzos, mientras que son solo hombres quienes se ocupan de la tarea del comercio, en la que brilla su capacidad para el regateo con los turistas, entre taza y taza de té, amenizadas por largas conversaciones —“prisa no buena”— que requieren otras habilidades, pero no la fuerza física.
Nada debería impedir que las mujeres que lo desearan pudieran competir con los hombres en el deporte
Son razones de otro tipo las que mantienen alejadas a muchas mujeres del deporte y de la mera gimnasia. Sociedades como la saudí se amparan en pretextos culturales y religiosos para apartar a las mujeres del deporte y la educación física, como contaba hace unos meses Ángeles Espinosa (Jugar al fútbol con velo para no incitar al pecado, EL PAÍS, 23-3-2012). Argumentos como que “la virginidad de las niñas podría resultar afectada por el exceso de movimiento y los saltos”, o que los deportes son para la mujer “pasos del diablo” que contribuyen a su corrupción moral y a un comportamiento antiislámico, o que la mujer corre especiales riesgos si en la práctica deportiva se mezclan ambos sexos, ofrecen pistas de las dificultades con las que se encuentran las mujeres también a propósito del deporte.
Algunos de los países que han accedido por fin a que sus mujeres participaran en los Juegos Olímpicos se han negado a que lo hicieran sin velo.
Las noticias proporcionadas por los recientes Juegos Olímpicos y Paralímpicos, incluida la meritoria obtención de medallas no previstas, muestran los esfuerzos de las mujeres para salir de ese agujero, a pesar de que hasta 2004 no hubo paralímpico femenino. Laura Gil personifica el éxito en baloncesto. La laureada futbolista Marina García abandona ese deporte porque “nosotras”, dice, “no podemos vivir del fútbol como un futbolista hombre”. Una chica discapacitada se revela como mejor nadadora que un nadador masculino. Los entrenadores de los equipos femeninos —curiosamente siempre son hombres— se asombran, en balonmano, de la “vitalidad y determinación sobrecogedoras” con que juegan las chicas. Y el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, considera “importantes los éxitos de las mujeres”.
Pero ¿se hace lo necesario para equiparar a las mujeres y a los hombres en las posibilidades deportivas?
Como contrapunto a esta lucha por la igualdad, hay mujeres, intelectuales del feminismo, que rechazan —todavía hoy— la participación femenina en el deporte, al que vinculan —siempre— con la violencia, hasta el punto de considerar que los meros espectadores del fútbol —incluso solo a través de la tele— no siempre saben tratar a las mujeres...(El País, 28 de Septiembre, 2012. Bonifacio de la Cuadra)


jueves, 12 de enero de 2012

NARRACIÓN DE PERSONAS LIBRO EN PATERNA DEL CAMPO

Empezamos el año con este encuentro entre Personas Libro que seguramente nos servirá para practicar lo que hemos ido aprendiendo en los diversos talleres que hemos realizado. Desde estas lineas os invito a que os acerquéis por aquí el día 20 para que conozcáis la forma en que desde estas asociaciones se fomenta la lectura y el Proyecto Fahrenheit 452 Las Personas Libro.

lunes, 21 de noviembre de 2011

25 de Noviembre. Día contra la violencia de género.

El 25 de noviembre fué declarado día Internacional contra la Violencia hacia la mujer en el Ier Encuentro Feminista de Latinoamérica y del Caribe celebrado en Bogotá (Colombia) en julio de 1981.

En este encuentro las mujeres denunciaron la violencia de género a nivel doméstico y la violación y el acoso sexual a nivel de estados incluyendo la tortura y los abusos sufridos por prisioneras políticas.
Se eligió el 25 de noviembre para conmemorar el violento asesinato de las hermanas Mirabal (Patria, Minerva y Maria Teresa), tres activistas políticas asesinadas el 25 de noviembre de 1960 en manos por la policía secreta del dictador Rafael Trujillo en la República Dominicana.
Sus cadáveres destrozados aparecieron en el fondo de un precipio. Para el movimiento popular y feminista de República Dominicana históricamente estas mujeres han simbolizado la lucha y la resistencia
Más información sobre las hermanas Miraval en el artículo: 25 de noviembre, homenaje a las Hermanas Miraval por Ana Mariñez Álvarez
En 1999, la ONU dio caracter oficial a esta fecha
El 25 de noviembre... conmemoración de la muerte de las hermanas Mirabal.
El 29 de noviembre - Desde el Parlamento Europeo la diputada Emma Bonino propone convocar en esta fecha un Día Internacional de Lucha contra la Mutilación Genital Femenina. Más información
El 1 de diciembre Día Internacional de Lucha contra el Sida
El 6 de diciembre marca el aniversario de la Masacre de Montreal, cuando un hombre disparó a 14 universitarias por ser feministas.El 10 de diciembre es la fecha en la que se conmemora la firma en 1948 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Con tales fechas, el Centro de Liderazgo Global de las Mujeres, CGWL inició hace diez años la campaña internacional "16 días de activismo contra la violencia hacia las mujeres".

viernes, 19 de agosto de 2011

Victimas de violencia de género en España.

En la primera mitad de este año, las mujeres que han perdido la vida en España a manos de su pareja suman ya 34 y según otras fuentes 40, el caso es que año tras año el número de mujeres asesinadas por esta causa va en aumento.
Año 2007: 71 mujeres.  ///Año 2008: 84 mujeres asesinadas ///Año 2009: 68 mujeres asesinadas /// Año 2010: 85 mujeres asesinadas
Pincha aquí para consultar los datos oficiales sobre violencia de género.

lunes, 13 de junio de 2011

II ENCUENTRO DE PERSONAS LECTORAS

El próximo día 30 de Junio celebraremos el II En cuentro de Personas Lectoras. En esta ocasión las cinco personas que van a narrar han seleccionado textos Mario Benedetti e Isabel Allende entre otros, que garantizan la belleza de las lecturas que realizarán para nosotros estos expertos lectores.